26.2.10

que tal un poco de dulce?

-Mierda.
-¿Mmm?
-¿Tú no comes nunca, nena?
-¿Qué?
-Tienes la nevera vacía.
-Pues hice la compra el martes. Imposible que esté vacía. Busca.
-Ya... Esa cosa verde que me acaba de guiñar un ojo al final de la balda, entre el embutido y el taper de macarrones... Creo que no es comestible, ¿sabes?
-Mmmm... pues yo que se. Mira en la despensa...
-Deja de mirar la tele como una tonta y hazme caso. Ya he mirado. Está vacía.
-¿El qué?
-La despensa. Y tu maldita nevera amarilla. Están vacías las dos.
-¿Vacías de qué? No me apuntes con ese dedo acusador, eh.
-Vacías de dulces. Se supone que los viernes eran tus días de comprar golosinas.
-Los viernes siguen siendo los días de comprar dulces. Nadie ha cambiado la fecha en esta casa, que yo sepa. Y vivo sola.
-Pues ya me dirás tú por qué no hay nada decente de comer en tu casa, mona.
-Ah, es verdad. El día no ha cambiado, pero sí el horario de salir a comprar. Gracias por recordármelo.
-Te odio cuando sonríes de esa forma tan... Te odio. ¿Y cuándo se supone que es esa hora?
-Me estás poniendo mala, ¡vuelve al sofá! Deja de rebuscar en mis armarios y cállate, que va a empezar la peli y tú por ahí danzando. Si tienes gusa hay palomitas en el armario de arriba, a la izquierda. Encima del micro.
-No quiero tus palomitas de antes de la guerra.
-No. Ni se te ocurra poner esa cara. Joder. Mira que das por saco, ¿eh, baby? No pienso salir a comprar ninguna cosa dulce hasta que te las pires de mi casa. Se supone que eres mi amigo, ¿por qué te empeñas en arrasar con mis existencias cada viernes y dejarme con la gana durante el resto de la semana?
-Precisamente porque soy tu mejor amigo mi deber es dejarte la despensa vacía y la nevera temblando. Vengaaa... Si te das prisa, llegas antes de que empiece la peli. Ya sabes, en veinte minutos de anuncios te da tiempo incluso a morirte.
-No se ni por qué te hago caso...
-Porque soy irresistiblemente persuasivo. Mira mi enooorme sonrisa encantadora llena de dientes.
-Deja de parpadear así, pareces algo raro. Supongo que ya sabes que me sacas de quicio, ¿no?
-Ese también es uno de mis deberes de amigo. Pero ponte una chaqueta que fuera hace frío.
-Si hay un sol de la leche...
-Y un aire que arrasa. Viento polar o no se que historias.
-Te odio.
-Mira qué bien. Ya nos odiamos los dos por igual. La bota... chica, ¿no la ves? Detrás de... lo que algún día fue un ser que hacía la fotosíntesis...
-Me vas a hacer salir con este frío, y todo.
-Aaaaa... Se siente. Tu casa. Tus víveres. Te toca salir a reponerlos y a me toca arrasar con ellos. Ley de vida. Haber comprado esta mañana, que hacía mas calorcito.
-Vergüenza debería darte.
-Pero no me da. Corre. Y ya que sales, no te olvides las llaves que después no te abro, que cojo el sitio en el sofá y no me muevo. Pilla lo de siempre, ¿vale? Ah, y pasa por a tienda de los guiris.
-¿Para? No tengo nada que comprar allí.
-Sí, cuatro cartones de aftereigth a tu nombre. No te preocupes, que ya los he pagado. Eh... no me mires con esos ojos tan grandes que me das susto. Es que hoy me dieron la miseria de los extras del mes pasado, ya sabes que me quedé haciendo un par de turnos dobles, y... qué importa. Ya pueden durarte como un mes entero, que ya te vale, a ocho pavos y medio el cartón... Mira que te gustan las cosas caras. No digas ni mu. Que te calles. ¡Cállate! Ahórrate las gracias. Son tus chocolates preferidos, ¿no? Pues ale, ya estás tardando en pirarte. Aquí te espero. No tardeees...



gracias a Rox tengo internet. No, no me he comprado un router ni nada por el estilo, qué va. Le he pinchado la red al vecino. Sí, al vecino zumbado, que es el único al que puedo extorsionar en el caso de que se de cuenta. Y, bueno, no ha sido gracias a Rox, si no a Oliver, un compañero inglés al que le encanta en parkour y que ha tenido que subir por el patio hasta la casa del vecino y pasar por la ventana, porque resulta que la cerradura era más compleja de lo que Rox (rosana -> roxanne -> Rox xD) había supuesto y... un largo etc que ahora no contaré. Ya si eso en otra ocasión. La cosa es que tengo internet de nuevo, no en el ordenador viejo mío de siempre, porque ese tiene noseque jodido y no se puede conectar (a internet) sino en el menos viejo, que es de mi madre. De modo que haciendo enganches, y empalmando una cosa con otra y tal y cual, pues de nuevo espero estar rondando por aquí. Veremos como va la cosa.

pd: el router antiguo nuestro murió con mi ordenador xD lo malo es que se le olvidó resucitar con él.

nos vemos!

16 comentarios:

Diane Ross dijo...

Jajaja, me ha encantado, en serio.
¡Y Dios mio! ¿¡Pero dónde te habias metido tú? Ya te echaba yo de menos. A tí y a tus fantásticas entradas, claro ^^

Jo, me encantan esos dos. Y yo también adoro los dulces.

Anónimo dijo...

Jaja, muy bueno tu dialogo y que lastima de tu router y tu ordenador.
Abrazos

nira~ dijo...

JAJJAJAJAJAJAJAJJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJA
pobre chaval/a tiene un amigo/a aprovechado/a XDDDDDDD
i ademas tiene una cosa que en su día fue un ser que hacia la fotosíntesis XDDDDDDDDDD
por cierto Kiwi (lol) tienes un premio en mi blog, pasa a recogerlo ^^
un beso!

Elena Cardenal dijo...

Jope, ahora me han dado ganas de comer chocolate...mmmm

Vaya dos, no? yo creo que se quieren. Pero no pueden estar ni juntos ni separados. Esas relaciones son un poco desquiciantes.

Besos!!

(me alegro que ahora cuentes mas con internet que antes, aunque sea de extrangis)

Isi G. dijo...

Los routers tienen esa fantástica costumbre tan hermosa, sí...

Me ha gustado mucho el texto^^ Un tanto rara la relación, pero me gustó^^

Eh... No, el texto no iba por ti, tranqui, iba por mi neurona xDDD La tía no es que fluctúe, es que nunca está u.u A ver si vuelve, que tengo varios textos pendientes!!!

Besotes^^

Anónimo dijo...

jajaja un diálogo buenísimo, ñam me entrado gusa de gominolas :)

El Drac dijo...

Qué trama, digan de telenovela se aman y no pueden estar juntos ni lejos, pero con los chocolates y el sexo estoy segurísimo que las cosas irán mejor. ¿no?

Belén dijo...

Y por qué no va a comprar los dulces?

Un amigo, a veces, hace eso...

Besicos

Juan Carlos dijo...

a mi me va mas lo salado.. tanto dulce me empacha.. aunque según en que cuerpo se coma ^^

light my fire dijo...

mira mi sonrisa llena de dientes.
yo tambien le vacio la despensa a mis amigos.


menuda estrategia la del amigo traceur que roba internet para que puedas coenctarte (:

Anónimo dijo...

Viernes día de dulces... Me gusta, suena bien :)

alvar dijo...

que no ves que los viernes estaremos en tu puerta esperando a que empieze la peli?
como siempre, genial

Doña María dijo...

Yo hago lo mismo. Voy a casa de mi hija a comer, devoro todos los dulces y luego me marcho dejándole la nevera vacía.
Por cierto, no deberías confesar tus crímenes antes de que te atrapen, hija.

Hollie A. Deschanel dijo...

¿Y qué tiene de malo tener la nevera vacía? Podrían hacer día de comerse el uno al otro :)

Beso!

. dijo...

Como adoro a los amigos que te desquician estando en tu propia casa! jajaja
Me encantó :)

Un muá.

Lexy Sen dijo...

JAJAJAJAJAJA!! Que dialogo más bueno!! Me ha encantado!
Te sigo sin duda alguna :)